Las bromas del Profeta y su jovialidad
29/01/2009| IslamWeb
La broma y el juego son una cosa muy apreciada por el alma, ya que facilitan la actividad y ayudan a hacer los trabajos con seriedad y energía, y son lícitos siempre que se ajusten a los preceptos legales, y si no conducen a un daño.
Y no sólo eso; sino que también son recomendables y favorecidos, ya que normalmente el alma es alcanzada por el aburrimiento, y por eso hay que tener unos periodos de descanso, y nadie los necesitaría tanto como el señor entre las criaturas y el último de los mensajeros. El Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, bromeaba con sus Sahabah, Que Al-lah Esté complacido con ellos, e igualmente con su familia, y con los menores a los que dedicaba una parte de su tiempo, tratándolos de una manera que podían aguantar y entender.
’Anas ibn Malik dijo en el Hadiz narrado por Abu Dawud, At-Tirmidhi y considerado Sahih por Al ’Albani que el Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, le dijo en tono de broma: "¡Tú eres quien tiene dos orejas!".
Se relata en un hadiz citado por ’Ahmad, Abu Dawud y considerado Sahih por Al ’Albani, que un hombre se dirigió al Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, y le dijo: ¡Mensajero de Al-lah! Dótame de una montura. El Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, le dijo: “te montaremos en la cría de un camello” , a lo que el hombre le dijo estupefacto: "¿y qué hago con una cría de camello?", el Profeta le dijo: “¿acaso no son cría de camello todo los camellos que ha parido una camella?”
Anas, Que Al-lah Esté complacido con él, dijo en el Hadiz narrado por Al Bujari y Muslim que el Profeta de Al-lah era el que mejores modales tenía. Anas tenía un hermano que fue denominado Abu ‘Umair, y una vez que se acercó a él el Profeta le dijo: "¿Dime Abu ‘Umair qué ha hecho An-Nugair?".Y An-Nugair era un ave pequeña con la que que jugaba el niño.
El Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, le pegó ligeramente a uno de sus Sahabah, Que Al-lah Esté complacido con ellos, con un palito en broma. Así pues; Asiad ibn Hadir, Que Al-lah Esté complacido con él, dijo en un Hadiz citado por Abu Dawud y considerado Sahih por Al ’Albani que una vez cuando él (’Asiad) hablaba con la gente bromeando y les hacía reírse, vino el Profeta , sallallahu ‘alayhi wa sallam, y le punzó ligeramente en su espalda con un palito; entonces le dijo: "déjame tomar mi retaliación de ti", le contestó: "muy bien", acto seguido le dijo: "pero tú llevas una camisa y yo no la llevo", por eso el Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, se la quitó, y entonces ’Asiad le abrazó y le besó la espalda. Luego dijo al Mensajero de Al-lah: “a eso me refería”.
El Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, sonreía ante sus Sahabah, Que Al-lah Esté complacido con ellos, les decía palabras amables, aceptando sus quejas amablemente y con cortesía. Yarir, Que Al-lah Esté complacido con él, dijo en un Hadiz citado por Al Bujari: “el Mensajero de Al-lah, sallallahu ‘alayhi wa sallam, nunca me evadió desde que abracé la fe musulmana, y nunca me vio sin que sonriera en mi rostro y me quejé a él de que no podía sentarme fijamente sobre los caballos, entonces puso su mano sobre mi pecho y dijo "Al-lahumm zabithu wa ’y‘alhu Hadian Mahdian (Oh Al-lah, Mantenle firme y Hazle guía y alguien bien guiado)".
El Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, bromeaba también con sus familiares, se confirmó en un Hadiz narrado por Al Bujari y Muslim que una vez fue a casa de ‘Ali, que era su primo y su yerno, cuando éste estaba durmiendo en la mezquita. Después de preguntar a Fatimah sobre él, ella le informó que se habían discutido por algo la noche anterior y que el la hizo enfadar y luego se fue a la mezquita a dormir. Al encontrarle en la mezquita le dijo: "levántate, dueño del polvo, levántate".
En cuanto a las bromas que hacía con su familia, y sus juegos con sus mujeres y con sus hijas, pues también eran parte de esta magnifica virtud de tomar las cosas con humor. El Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, hacía carreras con ‘A’ishah, Que Al-lah Esté complacido con ella, y la dejaba divertirse con sus amigas. Se confirmó en un Hadiz narrado por Al Bujari que ‘A’ishah , Que Al-lah Esté complacido con ella, dijo: "me divertía con las demás chicas en la casa de el Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, y cuando el Profeta, sallallahu ‘alayhi wa sallam, entraba, escapaban de él, pero él las acompañaba hacia mí para que permanecieran conmigo"
Pero en cuanto a los niños, pues se preocupaba mucho por ellos, y bromeaba con ellos, esto apareció claramente en lo que fue narrado sobre Al Hasan y Al Husain, Que Al-lah Esté complacido con ellos, ya que ‘Abd Al-lah ibn Shaddad narró bajo la autoridad de su padre en un Hadiz citado por Ahmad, An-Nasa’i y considerado Sahih por Al ’Albani que el Mensajero de Al-lah, sallallahu ‘alayhi wa sallam, salió para rezar el rezo de la noche una vez (Al ‘Isha’) llevando consigo a Al Hasan o Al Husain y le colocó al lado de él, luego pronunció el Takbir para comenzar a rezar, seguidamente se postró durante mucho tiempo. Mi padre dijo que levantó la cabeza y encontró que el chico estaba sobre la espalda del Mensajero de Al-lah, sallallahu ‘alayhi wa sallam, mientras se postraba, entonces mi padre volvió a su postración, y cuando el Mensajero de Al-lah, sallallahu ‘alayhi wa sallam, terminó el rezo, la gente le dijo: "Mensajero de Al-lah, te postraste durante mucho tiempo hasta tal punto que nos hiciste pensar que algo había ocurrido, o que Yibril, La paz sea con él, te estaba diciendo algo", él contestó: “nada de eso, únicamente fue que este mi hijo se montó en mi espalda y no quise apresurarme para darle gusto".
A través de esto queda claro que nuestra religión es flexible, ya que no hay contradicción entre la seriedad y el humor. Además, en nuestra religión islámica existe un alimento para los corazones y para el alma, unos consejos para purificar los cuerpos, y también abarca lo que distrae a las almas, y produce en ellas la alegría y la felicidad.