Segunda excusa: Estoy convencida de usar la vestimenta islámica pero mi madre me lo prohíbe y si la desobedezco iré al Infierno.
Quien responde con esta excusa es la más noble criatura de Al-lah. El Mensajero de Al-lah, sallallahu ‘alaihi wa sallam, concisa y sabiamente dijo: “No hay obediencia a las criaturas que implique desobediencia a Al-lah”. [Ahmad]
La valoración de los padres en el Islam, especialmente la madre, es muy alta. De hecho, Al-lah la Ha asociado con el más importante de los hechos: adorarle sólo a El, en varias aleyas. Dice (lo que se interpreta en español): {Adorad a Al-lah y no Le asociéis nada. Sed benevolentes con vuestros padres, parientes, con los huérfanos, pobres, vecinos parientes y no parientes, el compañero, el viajero insolvente y con vuestros esclavos. Al-lah no ama a todo arrogante jactancioso.} [Corán 4:36]
La obediencia a los padres es ilimitada, excepto en un solo aspecto y ese es el caso en que ellos manden desobedecer a Al-lah. Al-lah Dijo (lo que se interpreta en español): {Si vuestros padres se esfuerzan por hacer que Me asociéis copartícipes no les obedezcáis, pues es sabido que carecen de fundamento válido, pero tratadles con respeto. Seguid el camino de los piadosos, pues ante Mí compareceréis y os Informaré de lo que hacíais…} [Corán 31:15]
Dejar de obedecerles en el pecado no impide ser bueno y cariñoso con ellos. Al-lah Agregó en la misma aleya: {…pero tratadles con respeto. Seguid el camino de los piadosos, pues ante Mí compareceréis y os informaré de lo que hacíais…} [Corán 31:15]
En resumen: ¿Cómo puedes obedecer a tu madre y desobedecer a Al-lah, Quien te creó a ti y a tu madre?
Tercera excusa: Mi posición social no me permite reemplazar mis vestidos con vestimenta islámica.
Esta hermana está entre dos posibles posiciones: o es honesta y sincera o es una mentirosa resbalosa que quiere exhibirse con su Hiyab en atractivos colores y caro precio para estar “a tono con la moda”.
Empezaremos respondiéndole a la hermana honesta y sincera: ¿No sabes, querida hermana, que no es permitido para la mujer musulmana salir de su casa en ningún caso excepto que su ropa cumpla las condiciones del Hiyab islámico y es obligación de toda mujer musulmana conocer cuáles son estas condiciones?
Si te has tomado el tiempo y el esfuerzo de aprender tantas cosas mundanas ¿Cómo puedes ser negligente y descuidarte de aprender las cosas que te salvarán del castigo de Al-lah y Su ira después de la muerte? ¿Acaso Al-lah no Dice (lo que se interpreta en español): {Preguntadle a la gente de conocimiento [de entre la Gente del Libro] si no lo sabéis} [Corán 16:43)]
Aprende pues los requisitos del Hiyab verdadero. Si debes salir no lo hagas sin el Hiyab apropiado, buscando la complacencia de Al-lah y la humillación de Satanás. Esto es porque la corrupción que provocas con tu salida toda engalanada y expuesta es mucho más grave que el asunto por el que tuviste que salir al principio.
Querida hermana, si tu intención es sincera y firme encontrarás muchas manos bienhechoras que te asistan y Al-lah te facilitará las cosas. ¿Acaso no es Él quien Dice (lo que se interpreta en español): {Y sabed que Al-lah siempre le dará una salida a quien Le tema y le sustentará de donde menos lo espera. Y quien se encomiende a Al-lah, sepa que Él le es suficiente, y que Al-lah siempre hace que se ejecuten Sus órdenes.} [Corán 65:2-3]?
Con respecto a la “resbalosa”, decimos: el honor y posición es algo determinado por Al-lah, el Altísimo, y no se debe a los tratamientos de belleza, las exhibiciones de ropas coloreadas o el estar siempre “a la moda”. Se debe, más bien, a la obediencia a Al-lah y su Mensajero, sallallahu ‘alaihi wa sallam, y el apego a la pura ley de Al-lah y el Hiyab islámico apropiado. Lee las palabras de Al-lah (que se interpretan en español): {En verdad, el más honrado de vosotros ante Al-lah es el más piadoso} [Corán 49:13]
En resumen: Haz las cosas como le gustan a Al-lah para obtener Su complacencia y Su Paraíso; dale menos valor a las cosas caras y costosas y a la riqueza de este mundo.