El Profeta Muhammad, que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, le informó a ‘Uzman, que Al-lah esté complacido con él, en el año once de la Hégira, antes de su muerte, que durante su califato el fuego de la fitna ardería, así que le aconsejó la paciencia y que no abdicara, es decir, que no aceptara las demandas de los pérfidos, además, le anunció que durante esta dura prueba moriría como mártir.
‘Uzman, que Al-lah esté complacido con él, cumplió con lo que el Mensajero de Al-lah le había anunciado en el momento en el que ocurrió todo lo que él le había dicho que iba a suceder, hechos que son una señal de la veracidad del mensaje que el Profeta transmitió, pues le informó de sucesos futuros y estos pasaron tal como los había mencionado.
‘Aisha, la Madre de los creyentes, que Al-lah esté complacido con ella, reportó que durante la enfermedad de la que murió en Enviado de Al-lah, que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, pidió que trajeran ante él a uno de sus sahabas, le dijeron: “¿Quieres a Abu Baker?”, pero no respondió; le dijeron: “¿A Omar?”, pero guardó silencio también, entonces le preguntaron: “¿Llamamos a ‘Uzman?” y dijo que sí. Dijo: “‘Uzman entró y permaneció a solas con él. Mientras que el Profeta de Al-lah, que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, le hablaba, su cara cambiaba de gestos. Qais, su sirviente nos contó que el día en el que fue asediada su casa, ‘Uzman le dijo: ‘El Mensajero de Al-lah, que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, me anunció que esto pasaría y yo cumpliré con lo que él me pidió. Y ese día vio hecho realidad lo que se le había anunciado’” (Ibn Maya y el Albani dijo que era Sahih).
An-Un’man Bin Bashir, que Al-lah esté complacido con él, relató que ‘Aisha dijo: “El Mensajero de Al-lah, que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, mandó a llamar a ‘Uzman […] y le dijo, de las últimas palabras que pronunció antes de morir: ‘‘Uzman, Al-lah te honrará con el califato, si los hipócritas te piden que abdiques a tu mandato, no lo hagas aunque te asesinen y me encuentres en la vida del más allá… esto se lo repitió tres veces’. Le pregunté por qué no había contado este suceso antes, y ella me dijo que se le había olvidado. Fui donde Mu’awia y le informé de este reporte, pero no lo aceptó. Entonces le envió un mensaje donde le pedía a ella que le escribiera lo que había oído, y ella lo hizo tal como se lo pidió” (Ahmad). En un reporte registrado por At-Tirmidhi y del cual al Albani dijo que era sahih, se mencionan las mismas palabras que el Profeta, que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, le dijo a ‘Uzman.
Este hadiz destaca las virtudes de ‘Uzman Bin ‘Affan, que Al-lah esté complacido con él, y el gran amor y consideración que el Profeta de Al-lah, que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, sentía por él; además, como ya habíamos mencionado, destaca una de las señales de la veracidad del mensaje que Al-lah le reveló a Muhammad, ya que en él anuncia algo que sucedería en el futuro y efectivamente así pasó. También podemos señalar que no solo se anunció que ‘Uzman iba a ser uno de los califas, sino que, además, se declaró que aquellos que se revelaron en su contra no eran creyentes sinceros. En cuanto a la ciencia del hadiz, se comprende que una persona que haya olvidado un relato y luego lo recuerda y lo transmite, se le acepta, pues así lo hicieron los sahaba con este reporte de ‘Aisha.
Encontramos que no fue la primera ocasión en la que el Mensajero de Al-lah, que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, le informaba a ‘Uzman de lo que sucedería con él, pues Abu Musa Al Ash’ari, que Al-lah esté complacido con él, contó: “Me encontraba con el Enviado de Al-lah, que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, en un jardín de Medina; un hombre (‘Uzman) se acercó y pidió permiso para unirse a nosotros. El Profeta de Al-lah, me dijo: ‘Deja que se acerque y albríciale con el Paraíso, el cual se le concederá por soportar una tribulación que le ocurrirá’. Fui donde él y le dije: ‘Adelante. El Profeta te albricia con el Paraíso en retribución a una tribulación que presenciarás (refiriéndose a los sucesos que lo llevaron a su muerte como mártir’” (Bujari). Así lo explicó el shaij Ibn ‘Uzaimin también.
En el año treinta y cinco de la Hégira aconteció todo lo que el Profeta de Al-lah, que la paz y las bendiciones de Al-lah sean con él, había vaticinado, es decir, veinticuatro años después de su muerte, hecho que sin duda es un gran milagro que comprueba lo que Al-lah también dijo: {[…] ni habla de acuerdo a sus pasiones. Él solo trasmite lo que le ha sido revelado} [Corán 53:3-4].